Ref. # 3 El Narcocorrido

Narración objetiva del incidente

Es importante reconocer el trabajo de investigadores al tratar de conservar tradiciones y fomentar la libre expresión para que esta no se pierda, se vea limitada o cuartada. La historia de los corridos data desde los años treinta del siglo XX y es indiscutible el papel que han tomado en el pueblo mexicano como medio de narrativa de la historia y hasta de breviario cultural.

Hoy en día se vuelto muy popular el llamado narcocorrido en el cual se narra una historia verídica de los narcotraficantes, su forma de vida, los elementos que utilizan y su relación con la sociedad y la justicia, además hacen alusión a temas como: violencia, asesinatos, drogas, dinero, fama, prostitución, secuestro, extorción y una serie de estereotipos que distinguen a los narcos.

Reacción emocional al incidente

Hay quienes afirman que el narcocorrido debe ser libre, sin restricciones ni prohibiciones puesto que no representa ningún tipo de amenaza al contexto social o más aun, influencia sobre individuos a la hora de volverse delincuentes. Esta es una afirmación es hasta cierto punto afirmativa, dado que es muy poco probable que la prohibición de los narcocorridos influya directamente en la disminución del narcotráfico y se plantea que esta recae en enfocarse en otras situaciones más importantes como lo es la restructuración del sistema de gobierno y las estrategias del sistema judicial, las cuales dejan mucho que desear en cuestión de honestidad y justicia.

Interpretación inter-cultural del incidente

Sin embargo creo que es importante mencionar que si bien no es de gran trascendencia para algunos el ejercicio del narcocorrido, este  ha venido cambiando de forma notoria en los últimos años, podría decirse que su lenguaje ha subido de tono y a su vez pierde su objetividad y gana receptores. En los narcocorridos se utiliza una forma de proyectar seguridad del narco y demasiada confianza en sus acciones y en lo que dice. Quienes lo cantan y escuchan pueden convertir la narración de la canción en experiencia propia ya que lo repiten una y otra vez y llegan a identificarse con ellos en diferentes maneras. Muchos de los receptores de los narcocorridos son adolescentes en un punto muy vulnerable de la búsqueda de identidad y movidos por una situación de pobreza, falta de oportunidades y soledad, aspiran a integrarse al mundo de narcotráfico. Así, los narcocorridos cumplen, indirectamente, la función de hacer de esta actividad un anhelo, de presentarla como una alternativa viable para sobresalir en la vida, ya sea en lo económico, en la valentía o en la invulnerabilidad ante la ley.

Sería interesante reflexionar en cuanto a lo que realmente es bueno conservar o quizá aceptar que ni todo es malo, ni todo es bueno pero un granito puede significar una gran diferencia. En lo personal creo que la prohibición no es una buena estrategia de cambio positivo en cuanto al tema, pero quizá la revisión previa del contenido de la música en un plano de objetividad en pro de la libre expresión y no en pro de ejercer la narco cultura, seria tal vez una buena opción.

Anet